Por si no había quedado claro
Por si no había quedado claro, España se queda fuera del Mundial por segunda vez este año y por tercera en los últimos cuatro. Aunque quede lo de Tomane por ahí.
Por si no había quedado claro, España ha conseguido dibujar el exotismo y curiosidad en un mundo oval que le da muchísima menos importancia a nuestras miserias de las que nosotros creemos que ellos les dan.
Por si no había quedado claro, la apelación ha parecido ser más una extensión de las ganas que teníamos de seguir viviendo mundial y ovalmente que una ampliación de la realidad paralela de Regreso al futuro donde España jugaría un Mundial.
Por si no había quedado claro, al apartheid o cártel no hay que tocarle los bemoles. Son tramposos, sí, pero son sus tramposos.
Por si no había quedado claro, la norma sobre elegibilidad es una buena chusta, y precisamente por ello, hay que saber manejarla, con guantes y cuidado.
Por si no había quedado claro, desde el minuto uno hasta ahora todos han
ido a salvar su cabeza, no la del rugby español. Nadie quiso ser la
foto retrato colgada en las comisarias de los mentideros. Ahora se
buscan a todos. ¿El delito? Ninguno: entre todos la mataron y ella sola
se murió.
Por si no había quedado claro, el que el resto lo haga mal no hace que uno, cuando lo hace también mal, lo haga bien. Una cosa es la injusticia y otra la hipocresía. Si bien van muchas veces de la mano, la mayoría de estas la hipocresía no hace que sea todo menos justo, porque lo justo es elevar a todos por arriba cuando se comete una falta, no a todos por debajo. Y eso, en el cártel, no va a suceder.
Por si no había quedado claro, España se ha quedado en la anécdota recurrente para los anales de la historia mundialistas. Aunque no lo digan, sabemos que algunos estarán ya pensando qué deparará España en 2027. Espero que nada raro, por Dios.
Por si no había quedado claro, no se puede soplar y chupar al mismo tiempo, al igual que no se puede ir con una cosa y con la contraria en el mismo proceso. O sí se puede, pero hay que valer para ello.
Por si no había quedado claro, todos hemos entrado en una vorágine de cansancio emocional y hasta físico con todo esto. Ninguno se lo merecía, ninguno nos lo merecíamos.
Por si no había quedado claro, tenemos cinco años por delante, pero solo tres para empezar ya a construir el futuro. No se puede alargar más. Reconocimos a quienes se han dejado la piel en el campo y ahora hay que mirar al futuro. La filosofía de Eskorbuto viene muy bien al caso: El pasado ha pasado y por él nada hay que hacer, el presente es un fracaso y el futuro no se vé (pero se puede construir, se debe, desde ya). Y esto empieza en Canadá.
¡Vamos, Leones!
Texto Álvaro de Benito Fotografía Soraya Sanz
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