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Análisis / Luces y sombras del año I de la era Hansen (2/2: Deportiva)


Tras una primera parte analizando la visión más financiera,institucional y de gestión del primer año de la era Hansen, seguimos con una nueva entrega, esta vez indagando y desgranando la parte deportiva de estos primeros doce meses tras la proclamación del vallisoletano como presidente de la RFER unos meses marcados por lo convulso en cuanto a movimientos en los banquillos nacionales y en la traza de nuevas estrategias.

Nuevas maneras de entender el alto rendimiento

Otro de las grandes apuestas de la directiva en el plano deportivo pasa por lo que la FER denomina una política de high performance, lo que toda la vida en castellano se ha llamado alto rendimiento. Recientemente, la Federación inauguró una Academia de Alto Rendimiento deportivo en Valencia, la segunda tras Madrid, y anunció, casi sin quererlo, la creación de una tercera en Barcelona. Con la mente puesta en que los jugadores que muestren nivel para ser seleccionados en cualquiera de los combinados nacionales estén controlados y asesorados.

A esto se suma la reorganización de estructuras para facilitar el desarrollo del jugador, los tan manidos pathways (senderos, en castellano). No es algo novedoso en el fondo en el sentido de que ya existían maneras similares o alternativas de gestionar o controlar ese crecimiento, pero sí en la forma. Un resultado de esta política podría reflejarse en la creación de una sub-20 femenina a principios de este año, entendiendo esta como un paso intermedio de desarrollo entre la formación y la competición de la absoluta, o la futura y anunciada franquicia que sustituiría a Iberians (que analizo más adelante) y que podría sumarse a otras futuras.

A corto plazo, esta política debería servir para colaborar con los clubes en las labores de monitorización del talento, pero en el medio plazo debería repercutir en la competitividad de las selecciones. Sin embargo, el escollo más claro es saber qué pasa con aquellos cuya carrera tiene más oportunidades de desarrollarse fuera de nuestras fronteras.

Unificación de las políticas deportivas

Si bien ha sido fruto de los últimos meses de este año de mandato, el criterio de unificar las políticas de cada disciplina en aras de un objetivo común tiene tablas para ser un gran éxito de gestión deportiva. La anterior directiva mantuvo la “separación de disciplinas”, entendiendo el 7s y el XV como modalidades distintas no solo en lo deportivo sino también en el aspecto más contractual.  En 2020, Hansen, en entrevista para A Palos, proponía cierto continuismo en este aspecto y comentaba que “el seven requiere su espacio, que debe enfocarse en este caso como grupo profesional aislado y sólo en ciertos casos excepcionales, por conveniencia deportiva para mezclar habilidades, se debe juntar con el XV”.

Lo cierto es que el nombramiento de Yunque al frente de la dirección deportiva modificaba esa idea inicial y culminaba un periodo de pruebas organizativas y acababan con la bicefalia masculino-femenino para aglutinar en un solo nombre no solo las categorías por sexo, sino también las disciplinas de seven y XV para crear sinergias y aumentar el alto rendimiento.

El giro de entender ambas disciplinas como vasos comunicantes puede llegar a ser arriesgado teniendo en cuenta la infraestructura y cultura actual. Posiblemente, a largo plazo, el cambio de esta política debería dar sus frutos, pero siempre y cuando se entienda desde la Federación que las prioridades hay que saber gestionarlas y que, de momento, la voluntad y el esfuerzo no tienen nada que ver con la capacidad real de mantener cuatro selecciones senior compitiendo al máximo nivel.

La conversión y tutela de Iberians

Quizá una de las formas más demandadas por el público para el desarrollo de Los Leones fuera la creación de una franquicia para competir profesionalmente con jugadores seleccionables. En un encuentro con medios, Gabriel Sáez destacó que, a partir de este otoño, Castilla y León Iberians, la franquicia de la Super Cup de Rugby Europe, pasaría a estar tutelada por la FERy que en su mayoría iba a estar compuesta por efectivos elegibles para los intereses del XV del León.

Aunque no se sepa cuál es el futuro más inmediato de este movimiento, entender que el rugby actual en su campo de competición pasa por la creación de franquicias es un gran paso. La exploración de liga u otras competiciones posteriores en las que se incluya este "nuevo" proyecto aportará más o menos competitividad, pero ya se habría dado ese primer paso en la dirección correcta. Además, la suma de inercias en convocatorias comunes del XV absoluto y de la franquicia puede ser rentable en términos económicos y deportivos.

 


A vueltas con Santi Santos

Otro de los grandes símbolos y que se convirtió en una de las personificaciones del caso Van den Berg fue el seleccionador Santi Santos. La actual directiva mantuvo siempre una posición de tranquilidad y evaluación sobre un cargo que no vio cambios hasta pasado el último Campeonato de Rugby Europe. ¿Qué había pasado entre la urgencia del público que solicitaba cambios al frente del cuerpo técnico del XV del León inmediatos hasta ocho meses después, incluidos los partidos de otoño y el campeonato continental?

Se desveló oficialmente en una rueda de prensa que la directiva mantuvo con medios, y en el que el vicepresidente deportivo, Gabriel Sáez, declaró que Santos se había quedado a petición suya. Es decir, mientras que Hansen en una entrevista concedida a El Mundo declaraba meses antes que Santos estaba fuera, la realidad es que todavía se estaban recortando algunos flecos. A día de hoy, el XV del León mantiene su cabeza técnica sobre los hombros de Miguel Velasco, Miguelón, hasta que su interinidad finalice con la designación de un seleccionador que, de momento, sigue oficialmente sin nombre hasta que se aclare la rúbrica de Bouza, nombre del preferente y que fue designado como tal y pronunciado en asamblea a pesar de tener contrato vigente con la mundialista Uruguay.

Cinco salidas de seleccionadores

Hasta media decena de seleccionadores han ido cayendo durante estos meses de sus cargos. Iggy Martín es el último de la lista que completan Pablo Feijóo (7s masculino), Pedro de Matías (7s femenino, y al que sustituyó Martín), Juan Carlos Pérez (sub 20 masculino XV) y el mencionado Santi Santos (senior masculino XV). Si bien es cierto que cada despido o dimisión vino enmarcada por circunstancias muy distintas, las decisiones tomadas alertan de una fragilidad en los planes de los cuerpos técnicos o en los marcos en los que se desarrollan sus acciones.

Al frente de la política deportiva más ejecutiva, Yunque fue presentado hace unos meses como director deportivo de la RFER con la misión de aglutinar las disciplinas para crear convergencias y sinergias, y durante su corto periplo hasta la fecha, ya ha tenido que lidiar con la renuncia de Iggy Martín, salida relacionada con la no clasificación olímpica de Las Leonas; y con la de Juan Carlos Pérez, expulsión circunscrita a procesos legales que involucran a su persona por supuestas amenazas a un jugador.

Antes de la entrada de Barrio, fue noticia la salida de Pablo Feijóo, a medio caballo entre el motín de varios jugadores de la selección de 7s y un apellido que podía pesar demasiado. La relación del ex seleccionador masculino de seven y la FER finalizó en el primer trimestre tras llegar a un acuerdo sobre su despido. En el caso de Pedro de Matías, el ex seleccionador femenino de seven y la FER decidieron "de mutuo acuerdo" poner fin a su cargo tras cinco años y medio de servicio.

Además, la mediática entrada de Patricia García como entrenadora del seven femenino se convirtió en irregular, siendo la serie mundial de Tolosa la última aparición, sin viajar al Algarve en la primer manga del Europeo, siendo sustituida por Frederic Roberti en los Juegos Europeos de Cracovia y sin aparición en la última manga de los Europeos en Hamburgo. Actualmente, es formadora de seven en la Escuela de Verano.

Resultados de las selecciones absolutas

Quizá los datos deportivos más objetivos de todos vengan del balance de victorias y derrotas y de la consecución o no de los objetivos marcados a inicio de temporada en las selecciones absolutas. Un XV del León en fase de renovación solo ha podido ganar con claridad esta temporada su enfrentamiento contra Namibia, mientras que su actuación en el Rugby Europe Championship fue más bien discreta, alcanzando, con dos victorias bastante pobres, una exigua cuarta plaza en el total, tan solo por encima de las tres ascendidas (Bélgica, Polonia y Alemania) y Países Bajos.

Las Leonas no han levantado cabeza tras la eliminación de la carrera por el último Mundial, a pesar de la consecución de su enésimo Campeonato de Europa frente a la débil Suecia. Más allá del torneo continental, el XV femenino absoluto ha cosechado derrotas frente a Sudáfrica, Estados Unidos y doblemente contra Japón, todos ellos partidos previos a su derrota contra Italia en el clasificatorio de la WXV y que le ha llevado a encadenar cinco derrotas consecutivas.

En cuanto al seven, el equipo masculino consiguió su salvación in extremis en el último torneo de las World Series y mantiene esperanzas de clasificar a los Juegos Olímpicos desde un dificilísimo torneo preolímpico el año que viene, suerte que no podrán correr las Leonas, apartadas estrepitosamente del sueño olímpico por República Checa. En el Europeo, ambas selecciones fueron podio, con las chicas en un segundo puesto, mientras que los chicos, que defendían título, fueron bronce.

En cuanto a los rankings, en ambas categorías se han perdido puestos, con Los Leones ocupando la vigésima plaza y Las Leonas, la decimotercera.

 

Texto: Álvaro de Benito // Fotografías: Domingo Torres

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