Previa / Partido trampa en Bélgica

El XV del León llega a Bélgica en una cuarta jornada del Campeonato de Europa con cierto aura de punto de inflexión. Estos días se sigue hablando todavía de los casos dudosos de elegibilidad de Paila y de Bell, y del inevitable pensamiento que recorre cada baja de un jugador asimilado, como si de un nuevo fantasma se tratase.

Si de por sí el ambiente está ciertamente enrarecido, el plano deportivo no es mucho más halagüeño: España ha cosechado dos derrotas consecutivas, frente a Georgia y Rumanía, que, junto a algunos resultados sorpresa en otras jornadas hacen que el encuentro de mañana (Estadio Fallon, Woluwe-Saint-Lambert, 15.00 CET) sea más decisivo de lo que se esperaba al comienzo del torneo.

Los Leones llegan en una posición de extremos: si consiguen la victoria en la periferia de Bruselas, podrían llegar a disputar el subcampeonato, en Madrid, en una semana, frente a Portugal. Sin embargo, una derrota les pondría contra las cuerdas y el partido del próximo sábado en el Central frente a los lusos podría acabar en debacle. Y todo esto sin mencionar las posibles sanciones a las que se expone el equipo español en caso de tener una resolución de los casos de elegibilidad contraria a sus intereses.

Por todo ello, el encuentro de mañana es un partido trampa, donde se mezclan los espectros que vuelven siempre por marzo, y donde se espera mucha tensión y disputa. Prueba de ello es el equipo belga (que ocupa ahora mismo la tercera plaza, con 6 puntos) presenta una nómina de nombres con notable trayectoria, incluidos varios jugadores de las ligas francesas, algo distinta del grupo que cosechó una abultada -y previsible- derrota en Tiflis en la jornada pasada. 

Por todo ello, podría pensarse, sin mucho margen de error, que los belgas toman el encuentro contra España como definitivo para sus intereses en este Europeo, tanto como para salvarse (su principal objetivo al inicio de la temporada) como para llegar a Rumanía con la esperanza de una improbable victoria que la aupase al podio final en la última jornada.

España, por su parte, a pesar de la importancia del partido, llegará con un conjunto de elegidos del grupo que se ha entrenado estos días en San Cugat y en el que existen varias bajas no forzadas. Este aspecto es, quizá, el más llamativo, que jugándose lo que se jugará mañana España en Bélgica, los Top 14 Nueno y Malié no hayan acudido por encontrarse de vacaciones o que no podamos disponer de Paila y Bell por los propios errores administrativos. Además, existe la circunstancia de que varios jugadores españoles serán titulares o determinantes en sus respectivos equipos de la ProD2, como son Usarraga, Alvar Gimeno o Tomás Munilla.

Así, con todo, España alineará el quince inicial con Futeu, Pinto y Alberto Blanco; Mora y Walker-Fitton; Sánchez, Guillaume y Tauli; Rouet y Rubio; Contardi y Julen Goia; Rábago, Nieto -que debutaría-, y Casteglioni. Esperarán en el banquillo José Díaz, Del Hoyo, Zabala, Hogg, Barrera, Aurrekoetxea, Vinuesa -que podría sumar su primera cap- y Hugo Alonso.

Los belgas desplegarán a Cuffolo, Dienst y Jadot; Verschelden y Benoy; De Coninck, Decubber y De Molder; Berger y Williams; Wallraf y Bontems; Piron, Muric y Dowsett. En el banquillo estarán Jassen, Massimi, Billi, Van Bost, Cocqu, Vassart, Lalli y Vliegen. Arbitrará el irlandés Sean Gallagher.


Foto: Domingo Torres Ortiz